Son esos días que ni con 1kg de heleado te conformas, esos en que te estalla la cabeza de tanto pensar y pensar. Y buscarle un sentido a todo esto que bien llamamos "vida". Esos días que no te entendes ni vos misma, lo único que alivia es tener una almohada y canciones de James cerca. En que los nudos se multiplican por mil en tu garganta y sin tener un "por que" directo y conciso y miles a la vez. Encerrarse en la habitación y tirarse en la cama es la solución por un rato. Sí, en estos casos, me encantaría tener un poder para desaparecer, si me cumplieran un deseo sería dormirme hasta enero. Pero es inútil desear eso, porque mañana hay que levantarse otra vez y seguir con la rutina.. jodida pero cierta verdad.

Debería hacerme menos la cabeza por cosas estúpidas e insignificantes, si total, por algo se dice que el destino ya está escrito para cada persona.